Museo San Esteban Tetelpan: Cuento
La visita de la momia niña a Tetelpa El pueblo de TETELPA, (en Zacatepec), estaba muy entusiasmado con la nueva exposición que tendría su Museo Comunitario San Esteban Tetelpan “La momia niña de Huecahuaxco”. La gente visitaba constantemente el Museo para conocer a “La momia niña”, los niños eran los primeros en visitarla y estos llevaban a sus padres a conocerla, causó tanta expectación e interés que la momia niña se quedó más tiempo de lo programado. Pero en días siguientes…en que los pobladores la conocieron, se comenzaron a notar sucesos, los cuales causaron asombros entre los habitantes del pueblo de Tetelpa, había quienes decían que veían a la momia niña por la noche en las calles cercanas al Museo, la curiosidad, el miedo y el escepticismo, no tardó en presentarse entre los pobladores. Seguían pasando los días y en el pueblo corrían con más intensidad los comentarios, ahora ya no solo veían a la momia niña caminando en la oscuridad de las calles, sino que también “llorando y pidiendo almas”. Tan es así que alguien comento que a la persona que cuida la Iglesia de San Esteban del pueblo de Tetelpa, (ya que el museo está en el Excurato) se le había aparecido la momia niña y le dijo que de este pueblo se iba a llevar con ella a 27 almas, lo cual hizo que la gente empezara a tenerle miedo. En el tiempo en que “La momia niña de Huecahuaxco” estuvo en el Museo Comunitario “San Esteban Tetelpan”, en ese periodo acaecieron 9 personas continuamente, lo que iba haciendo a la gente del pueblo en creer lo que por ahí se decía, entonces los pobladores empezaron a culpar a la momia niña, se alarmaron tanto, que dejaron de visitar a la momia en el museo, y siendo la fecha en la cual terminaba la exposición. La misión de esta exposición era educativa para dar a conocer que hay 3 tipos de momificación, El natural (que depende de factores medioambientales), El artificial y El “Natural Intencional” (que depende de factores medio ambientales y signos de actividad humana que denotan la intención de preservar el cuerpo) a la cual pertenecía “La momia niña de Huecahuaxco”. AUTOR: ROSALBA BASTIDA ALMAZAN
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