Pirámides de Xochicalco en Morelos

Xochicalco es la Zona Arqueológica más grande del estado de Morelos y la quinta a nivel nacional con mayor número de visitantes. Su nombre proviene del náhuatl, y significa Lugar de la Casa de las Flores.

El sitio de Xochicalco fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación, pero no sólo eso, su importancia histórica y cultural es tan grande que el primero de diciembre de 1999 la UNESCO lo declaró Patrimonio Cultural de la Humanidad.  

Historia

Este importante centro ceremonial tuvo su apogeo entre los años 650 y 900 de nuestra era, justo entre la caída de Teotihuacan y el surgimiento de Tula.

A principios del siglo XIX, el cronista Pedro José Márquez atribuyó su construcción a los toltecas.  

Urbanismo

En el momento en que Teotihuacan pierde su poderío sobre el territorio mesoamericano, surge una inestabilidad político-social que obliga a los pueblos a desarrollar mecanismos de defensa. Por ello Xochicalco fue construido como una ciudad fortificada, sobre una colina que se eleva 130 m. sobre la planicie circundante. Todo el cerro fue modificado artificialmente mediante cortes, rellenos y muros de contención, para formar terrazas que dieron al sitio el aspecto de un basamento piramidal de dimensiones geológicas. En la parte superior se crearon grandes espacios nivelados en los que se asentaron las plazas y los principales edificios públicos y religiosos, así como suntuosos conjuntos residenciales para las clases gobernantes, religiosas y militares.  

Monumentos

Son de especial interés los relieves esculpidos en los lados de algunos edificios. El templo de la Serpiente Emplumada, por ejemplo, tiene finas y estilizadas representaciones en un estilo que incluye una aparente influencia teotihuacana y maya. Por esto se especula que Xochicalco debió haber tenido una comunidad de artistas provenientes de otras partes de Mesoamérica.

En el centro de la Plaza Central se encuentra un adoratorio que contenía una estela con dos glifos. A los costados de la plaza se observan los edificios Este y Oeste, y hacia el fondo la Gran Pirámide, que es la construcción de mayores dimensiones del sitio. Hacia el sur se localiza el Juego de Pelota más grande de los tres que se han encontrado, así como veinte altares redondos y uno cuadrado, los que tal vez se utilizaban para el cálculo del calendario ritual de 260 días. También hay un conjunto habitacional conocido como El Palacio, que quizá era ocupado por los nobles.

En la Plaza Principal se encuentra la Pirámide de la Serpiente Emplumada, edificio de extraordinaria belleza y enorme significado, decorado con relieves por sus cuatro caras. También está aquí el Templo de las Estelas, del que fueron tomadas las tres estelas relacionadas con Quetzalcóatl que se exhiben en el Museo Nacional de Antropología. Hacia el este se encuentra otro Juego de Pelota, la Rampa de los Animales, y el Conjunto Central, área donde se localiza un altar policromado, un complejo temascal y una cisterna para almacenar agua de lluvia.

Cabe mencionar que la gran cantidad de cuevas que se encuentran en las laderas del cerro, no son naturales. Muchas de ellas fueron acondicionadas para ser usadas con diferentes propósitos, tal es el caso de la cueva en donde se encuentra el Observatorio. 

Es importante mencionar que Xochicalco posee una serie de drenajes pluviales cuya función es la de almacenar el agua en cisternas. Todos estos drenajes estaban hechos con tubos preconstruidos que se ensamblaban de forma muy similar a los de hoy en día. 

Sitio Astronómico

La zona cuenta con un observatorio astronómico utilizado principalmente para marcar el inicio del ciclo agrícola. Originalmente se encontraba recubierto con estuco y pintado de colores negro, amarillo y rojo. Cuenta con una chimenea de observación que de la base a la superficie mide 8.7 metros. En un período de 105 días, que va desde el 30 de abril al 15 de agosto, el sol penetra por la chimenea. En el movimiento del sol hacia el Trópico de Cáncer y a su regreso, respectivamente los días 14/15 de mayo y 28/29 de julio, el astro está en su cenit y en el mediodía astronómico: el haz de luz cae directamente a través del tubo proyectando la imagen del sol en el piso. Seguramente aprovechando el fenómeno solar, el lugar fue usado también para ceremonias religiosas. 

Cómo llegar

La Zona Arqueológica de Xochicalco se encuentra ubicada dentro de los municipios de Miacatlán y Temixco, en la porción occidental del estado de Morelos, a 32 kilómetros de la ciudad de Cuernavaca.

Para llegar es necesario tomar la carretera 95 en dirección a Acapulco. En Alpuyeca se toma la desviación hacia Miacatlán. Ocho kilómetros adelante hay una desviación a la derecha. Por ella avanzamos cuatro kilómetros para llegar a la zona arqueológica.  

La Zona abre de lunes a domingo, todos los días del año de 9:00 a 18:00 hrs.

Están exentos de pago las personas mayores de 60 años, las menores de 13, los jubilados y los pensionados. Del mismo modo podrán entrar de manera gratuita profesores y estudiantes con credencial vigente de la institución a la que pertenecen, o aquellos que muestren la emitida por el Instituto Mexicano de la Juventud.

 
Los domingos la entrada es gratuita para todo público, excepto extranjeros no residentes en el país.  

Se recomienda no llevar mascotas ni objetos voluminosos.  

Si desea observar el observatorio, puede solicitarlo en la entrada de la zona. El servicio no genera un costo adicional.

Para llegar a las Pirámides de Xochicalco, se aborda un autobús en la terminal México – Zacatepec con destino hacía Coatlán del Río. También, se puede abordar un autobús Lasser con destino a Cuentepec. Esta terminal se localiza a un costado del mercado Adolfo López Mateos.

Para ambas opciones hay que bajarse en el crucero a Xochicalco donde se toma un taxi al sitio o se caminan 4 kilómetros.

Horario

Museo: Lunes a domingo de 9 a 17 horas.
Zona Arqueológica: Lunes a domingo de 9 a 17: 30 horas.

Contacto

Teléfonos: (01) (737) 374 – 3091 / (01) (737) 374 – 3092.

Aviso: El visitante podrá comprar boleto de entrada para la zona arqueológica hasta las 17 horas.

Autor: LIZ NESTOR